Ficha de Allen Walker

Se podría decir que Allen es, esencialmente, una buena persona, mostrándose amable, generoso y educado con quien merece ese trato. Siempre está dispuesto a ayudar a otros, salvo que les vea como causas perdidas o que hayan provocado un grave sufrimiento a otras personas inocentes. Aunque a veces puede ser algo ingenuo en sus aspiraciones, tiene muy claro que hay seres a los que se debe destruir por el peligro que pueden representar, por lo que no se le puede clasificar como pacifista, en sentido estricto. Simplemente prefiere no tener que herir o matar a nadie, pero llegado el caso lo hará sin pensarlo. Como consecuencia de su pasado, suele tener pesadillas y alucinaciones matutinas, no duerme demasiado bien por lo que es habitual verle haciendo ejercicio a altas horas de la madrugada.  Es consciente de lo poderosa que es su magia, así que es juicioso al utilizarla contra otros miembros de gremio legales, pero para proteger a sus compañeros haría cualquier cosa.


Huérfano de nacimiento, fue recogido de la indigencia por una compañía circense a una edad tan temprana que ni lo recuerda. No tardó en ganarse su sustento junto a aquella gente participando en espectáculos de acrobacias, malabarismos y trucos de magia, demostrando un talento innato en aquel campo. A pesar de que le trataban muy bien, no era como tener una familia de verdad, por lo que en secreto envidiaba a los niños que venían a ver sus espectáculos.

Una noche, acampados en un bosque al calor de una hoguera camino a otro pueblo, fueron asaltados por un grupo de magos oscuros que buscaban robarles. Ya les había sucedido otras veces, eran gente pacífica por lo que eran un blanco fácil para aquellos sujetos. Después de entregarles su dinero, no parecieron contentos por el botín, e intentaron llevarse a algunas de las chicas de la compañía. Al negarse, mataron al líder, que era como el padre de hecho de Allen. Aquello provocó que el pequeño se lanzara en busca de venganza, pero solamente recibió una grotesca herida en torso que sigue presente a día de hoy como recordatorio de aquella noche. Su acción provocó que aquellos malvados decidieran acabar con el resto de la compañía, algo que hicieron entre carcajadas.

Cuando solo quedaba él, la furia que le invadía hizo que moviéndose a una velocidad cegadora, fuera capaz de acabar con aquellos magos oscuros de bajo nivel. Aunque lo había hecho demasiado tarde como para poder ayudar a alguien. Fue encontrado por la mañana, muy débil, por parte de una pareja de ancianos que le cuidaron hasta que se recuperó. Consciente de su hasta ahora desconocido poder, se dirigió a Sabertooth, donde le aceptaron por lo prometedora que era su magia y le adiestraron hasta que pudo ser un miembro activo del gremio.